miércoles, agosto 24, 2016

Queridos lectores y amigos de Diario de la Inmigración,

Después de 10 años en la diaria tarea de publicar este blog, llega el momento de escribir nuestra última entrada.

Quedan muy lejos aquellos primeros posts de 2006 en los que recogíamos las tragedias humanitarias que suponían todos y cada uno de los cayucos que, atestados de historias dramáticas, llegaban a nuestras costas con una esperanza de futuro, de una vida mejor. Nuestro afán entonces, y aún ahora, era promover en nuestra sociedad una concienciación al respecto, un empeño diario en reflejar las duras condiciones en que llegaban nuestros semejantes que, solo por el hecho de haber nacido en otro lugar, no tenían las mismas oportunidades de futuro que nosotros.

Han sido años de sinsabores, de sufrimiento por ver cómo las mafias explotaban la situación de miles de hombres, mujeres y niños que luchaban por una vida mejor, de incomprensión ante una sociedad que se escudaba en el miedo a lo desconocido para rechazar la inmigración de la que nosotros mismos formamos parte en nuestro pasado.

Pero también han sido años de esperanza al ver que, en el fondo, nuestra solidaridad siempre estaba presente, y de alegría, al ver construirse nuevas historias con una posibilidad real de futuro, reflejadas principalmente en la sonrisa de los niños.

 Lo que nació, como reza nuestra cabecera, "como un foro de informacion, abierto al intercambio de ideas y de propuestas, con ese objetivo de dar algo de esperanza en la situación actual de los inmigrantes" debe quedar ahora como un registro, un relato crudo de lo que ha sido en estos diez años la historia de la inmigración, principalmente en las costas de nuestro país.

Gracias por el interés que has tenido en seguirnos y apoyarnos.

Hasta siempre,

             Diario de la Inmigración

2 comentarios:

Imanol dijo...

Pues de verdad que lo siento: habéis sido uno de mis blogs de referencia. En todo caso, muchas gracias.
Imanol Zubero
http://imanol-zubero.blogspot.com.es

Diario de la Inmigracion dijo...

Gracias Imanol,
Ha sido nuestro afán dar voz a esta tragedia, y nos satisface recibir comentarios como el tuyo, que nos indica que el esfuerzo ha valido la pena.
Saludos,