lunes, julio 13, 2015

La avalancha de cubanos que llegan sin papeles a EEUU colapsa los servicios de asistencia social

DDC | Miami | 10 Jul 2015 - Algunos recién llegados se ven obligados a dormir en la calle y los centros de ayuda tienen colas de hasta dos meses. El aumento del número de cubanos que llegan sin papeles a Estados Unidos, debido al anuncio del restablecimiento de relaciones diplomáticas, es tan elevado que los servicios de asistencia social en Florida no dan abasto, han colapsado y tienen una lista de espera de casi dos meses, informa el periódico español El Mundo. Esta situación retrasa el asentamiento de estas personas en otros estados, el recibimiento de permisos de trabajo y la ayuda monetaria de emergencia. Los recién llegados temen que la reanudación de relaciones diplomáticas a nivel de embajador pueda acabar con las leyes migratorias excepcionales. Según cifras de los Servicios de Inmigración, desde el inicio del año fiscal el 1 de octubre, han ingresado al país casi 19.000 cubanos, sea por vía marítima o por la frontera con México, una cifra equivalente al total de llegadas el año anterior. Desde el anuncio del deshielo, llegaron dos tercios de esa cifra. El periódico relata el caso del cubano Antonio Mora, de 27 años, quien llegó a Miami tras ingresar al país a través de la frontera en la localidad de Laredo, en Texas, un paso fronterizo conectado con Nuevo Laredo, en México. Fue entrevistado, expuso su argumento de refugiado cubano y admitido al país sin problemas. De inmediato se desplazó al sur de Florida pero no tiene familiares allí y ha quedado desamparado. El joven sobrevive a la intemperie en el estacionamiento de un centro comercial de la ciudad de Doral, en el área metropolitana de Miami junto a otros tres compatriotas. "Llegamos sin dinero ni familia. En Cuba se dice que el Gobierno de Estados Unidos da asilo a los cubanos. Mientras tanto, tenemos que estar a la intemperie", enfatiza con cierto desespero. Organizaciones católicas de ayuda social señalan que están desbordados. "Es mucho lo que está llegando. Nosotros vivimos de los programas estatales y contribuciones privadas", indican fuentes consultadas por el medio. "Pero con la crisis ha disminuido esa contribución y los fondos se agotan. No tenemos capacidad para procesar tanta gente", explica Arnaldo Vicente, uno de los voluntarios de Caridades Católicas, el más importante hogar de refugiados de Florida, sin precisar más detalles porque no está autorizado a comentar el problema. http://www.diariodecuba.com/cuba/1436562720_15626.html

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